Salmo de Hemán ezraíta.

Fe para el que se acerca a su fin

V1
Oh Eterno, Dios de mi salvación día y noche clamo a ti.
V2
Llegue mi oración a tu presencia, inclina tu oído a tu clamor.
V3
Porque saturado estoy de males, y mi vida está al borde del sepulcro.
V4
Soy contado con los que descienden al hoyo, soy como hombre sin fuerza,
V5
puesto aparte con los muertos, como los pasados a espada que yacen en el sepulcro, de quienes no te acuerdas ya, que fueron separados de tu mano.
V6
Me has puesto en el hoyo profundo, en tinieblas y honduras.
V7
Sobre mí reposa tu ira, me has afligido con todas tus ondas.
V8
Has alejado de mí mis conocidos, me has puesto por abominación a ellos,* encerrado estoy, y  no puedo salir.
V9
Mis ojos enfermaron a causa de mi aflicción, te he llamado, oh Eterno, cada día, a ti extendí mis mano!
V10
¿Mostrarás tus maravillas a los muertos? ¿Se levantarán los muertos para alabarte?
V11
¿Se hablará con tu amor en la tumba? O, ¿de tu fidelidad en el lugar de la destrucción?
V12
¿Serán conocidas en las tinieblas tus maravillas tu justicia en la tierra del olvido?
V13
Pero yo a ti clamo, oh Eterno. De mañana mi oración llega ante ti.*
V14
¿Por qué, oh Eterno, me deshechas? ¿Por qué escondes de mí tu rostro?*
V15
Estoy afligido y enfermizo desde mi juventud; me han abrumado tus terrores; y estoy medroso.
V16
Sobre mí han pasado tus iras, y me oprime tus terrores.
V17
Me han rodeado, de continuo, como el agua, me han cercado a una.
V18
Has alejado de mí al amigo y al compañero, y mis conocidos están en las tinieblas.